4ş DOMINGO DE PASCUA - Ciclo B
JORNADA DE
ORACIÓN POR LAS VOCACIONES
Con la Virgen María, seguimos contemplando la
Resurrección de Cristo. El que ha muerto en la cruz, ha resucitado. Por eso,
el que ha sido rechazado, es el fundamento de nuestra fe y de nuestra
existencia cristiana.
PRIMERA LECTURA. Hechos de los
Apóstoles, 4, 8-12.
Jesús resucitado es el fundamento de nuestra fe.
Jesús muerto y resucitado es el fundamento de
nuestra fe, la piedra angular sobre la que se alza el edificio de la Iglesia
comunidad de los redimidos. Jesús
es la piedra que desechasteis vosotros los arquitecto, que se ha convertido
en piedra angular.
Necesitamos de Cristo para salvarnos y ser
miembros de la Iglesia. Nuestra vida sobrenatural se construye sobre el
nombre de Jesús: ningún otro puede
salvar y bajo el cielo no se nos ha dado otro nombre que pueda salvarnos.
La fuerza del
nombre de Jesús.
Pedro proclama a los jefes y senadores del
pueblo que curan a los enfermos en el nombre de Jesucristo Nazareno
a quien vosotros crucificasteis y a quien
Dios resucitó de entre los muertos.
En el nombre de Jesús, nosotros somos curados
de los pecados y recibimos la gracia en los sacramentos. También, en el
nombre de Jesús, podemos ser curados de las enfermedades corporales.
Invocación
mariana.
Madre de Cristo muerto y resucitado: Tú eres
la Omnipotencia suplicante por ser la Madre de Dios. Invoca sobre nosotros
el nombre de tu Hijo Jesús para que nos veamos libres de las enfermedades
del alma y del cuerpo.
SEGUNDA LECTURA. Primera carta de
San Juan, 10, 11-18.
Somos hijos del Padre por Jesucristo.
Jesucristo es la revelación y la donación del
amor que nos tiene el Padre. Somos hijos de Dios, gracias al amor del Padre
que nos ha sido dado en Jesucristo.
Mirad que amor nos ha tenido el Padre para
llamarnos hijos de Dios, pues ˇlo somos!
Ser hijos –adoptivos- de Dios quiere decir
que participamos de la naturaleza divina por la gracia santificante que
Cristo causa en nosotros, que entramos en la comunión trinitaria, que somos
herederos de la gloria, destinados a ver a Dios tal cual es.
El mundo no nos
conoce.
El mundo no nos conoce porque no le
conoció a Él. El mundo no entiende las exigencias de nuestro ser como
bautizado, ni las acepta, porque ni conoce, ni ama a Jesucristo.
Por eso, tenemos que ser valientes en medio
del mundo para perseverar en la vida sobrenatural y para dar testimonio de
nuestra fe en Jesucristo aunque seamos rechazados y perseguidos.
Invocación
mariana.
ˇSanta María, hija predilecta del Padre,
Madre-Virgen del Hijo, Esposa del Espíritu Santo! Jesucristo se manifiesta
privilegiadamente en ti como don del amor del Padre. Enséńanos a ser
portadores del amor que el Padre nos ha dado en Jesucristo y a manifestarlo
en medio del mundo.
TERCERA LECTURA. San Juan 10,
11-18.
Jesús es el buen Pastor.
Yo soy el buen Pastor,
declara Jesús. Trata de hacernos entender las cualidades del amor que nos
tiene.
Jesús nos
ofrece su vida por amor.
Jesús es el buen Pastor que da su vida por
nosotros porque nos ama. No nos abandona, ni huye, cuando estamos en
peligro, cuando el enemigo quiere hacer estragos y dispersarnos. Está
siempre junto a nosotros para defendernos a costa de su propia vida.
Jesús nos
conoce en el amor.
Jesús es el buen Pastor que conoce a sus
ovejas en el amor y éstas le conocen en el mismo amor, igual que el Padre
me conoce y yo conozco al Padre. El Padre conoce al Hijo y el Hijo al
Padre en el Espíritu Santo. Y en ese misterio de mutuo conocimiento en el
amor del Espíritu Santo esta el cocimiento que Cristo nos tiene y el que
nosotros le tenemos a Él. Si queremos conocer a Jesucristo, hemos de
perseverar en el amor sobrenatural para experimentar el gozo del amor que
nos tiene y que nosotros tenemos a Él.
Jesús busca
amorosamente a todos.
Tengo, además, otras ovejas que no son de
este redil: también a esas las tengo que traer; y escucharán mi voz u habrá
un solo rebańo, un solo Pastor.
La redención se ordena a todos los hombres,
Jesús los busca a todos y la Iglesia tiene como misión prioritaria trabajar
para que todos los hombres conozcan y amen a Jesucristo, para que vivamos
unidos en un solo rebańo bajo un mismo Pastor.
Jesús es el
amado del Padre.
Jesús es el amado por el Padre desde toda la
eternidad. Entrega libremente su vida para recuperarla. Todo por
nuestra salvación en obediencia al Padre. Este es el mandato que he
recibido del Padre, nos dice Jesús, y que yo acepto en y por amor.
Invocación
mariana.
Madre del buen Pastor que participas
privilegiadamente del amor que Cristo nos tiene, como Madre y Corredentora.
Hoy celebramos la Jornada mundial de oración por las vocaciones.
Te pedimos por las vocaciones al sacerdocio y
a la vida consagrada. Que haya jóvenes dispuestos a decir sí a Cristo en el
amor para que el conocimiento y amor de Cristo llegue a todos los hombres.
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