ESQUEMA
INTRODUCCIÓN
EL ROSARIO
(n.1): Oración
· Apreciada
por numerosos santos.
· Fomentada
por el Magisterio.
· Sencilla
y profunda, destinada a producir frutos de santidad.
· Encuadra
en el camino espiritual del cristianismo.
·
Centrada
en la Cristología, de carácter mariano.
·
Compendio de
la profundidad del mensaje evangéilico.
· Resuena
la oración de María: perenne Magnificat. María Rosario vivo porque vive y
guarda en su corazón los misterios de la vida
de Cristo.
·
Se aprende
de María a contemplar el rostro de Cristo y a experimentar su amor.
·
Se obtienen
gracias por medio de María.
·
Ejercicio de
la solicitud maternal de María (n.7): Ahí tienes a tu Madre (Jo.19,27)...
María se sigue haciendo presente... Lourdes, Fátima...
CAPÍTULO I
CONTEMPLAR A CRISTO CON MARÍA:
-
Mirar a Cristo con
María (nn. 10-11).
-
Recordar a Cristo con
María (nn.12-13).
-
Comprender a Cristo
con María (n.14).
-
Configurarse a Cristo
con María (n.15).
-
Rogar A Cristo con
María (n.16).
-
Anunciar a Cristo con
María (n.17).
1-
Contemplar el rostro de Cristo
(n.9). Contenido
principal del Rosario. Hilo conductor: la Transfiguración (Mt.17, 2):
“icono de la contemplación cristiana”. Invitación a fijar los ojos en el
rostro de Cristo. Descubrir su misterio desde la infancia... Nos dispone a
acoger el misterio trinitario.
2-
Mirar a Cristo con María (nn.10-11).
María, modelo
insuperable
para aprender a
mirar el rostro de Cristo. Cristo le pertenece especialmente porque es su
Hijo... contempla su rostro, los misterios de su vida desde la concepción
hasta la resurrección y la ascensión, en actitud de adoración
2.1-
Con mirada interrogadora (de
asombro):
en el templo (Lc.2,48).
Nosotros interrogamos a Cristo: ¿quién eres?. Cristo nos interroga: ¿quién
soy yo? (Lc. 9,18)
2.2-
Con mirada penetrante:
Caná (Jo.2,5).
María está
identificada con el querer del Hijo. Por eso no duda del querer del Hijo:
“Haced lo que Él os diga”
Mirada penetrante al
Hijo: “No tienen vino”. A nosotros: “Haced lo que Él os diga.
2.3-
Con mirada dolorida.
A su Hijo en la
Cruz (Jo.19,26-27). A nosotros por nuestro pecado, causa de la muerte del
Hijo. Nosotros aliviamos el dolor de la Madre con el Rosario.
2.4-
Con mirada espiritualmente
parturienta:
Madre
que acoge a Juan (Jo. 19, ibid.) Nos sigue acogiendo como hijos en el
Bautismo, la vocación... nosotros, acogerla a Ella como Madre.
2.5-Con mirada radiante:
Al Hijo resucitado. A nosotros, partícipes de la gracia del Hijo
resucitado.
2.6-
Con mirada ardorosa:
Pentecostés (He.1,14).
3-
María :
(11)
3.1-
Guarda en su corazón las miradas, la contemplación de Cristo (Lc.2. 19.
51), la vida de su Hijo... es su Rosario. Hacemos nuestra la mirada de
Maria a Cristo, cuando rezamos el Rosario.
3.2- Asumpta
al Cielo, nos propone los Misterios de su Hijo para que sean
contemplados
por nosotros.
3.3- Rezar
el Rosario: estar en sintonía con el corazón, el recuerdo y la mirada de
María.
4-
El Rosario, oración
contemplativa (12).
Ayuda a recordar
a Cristo, comprenderlo, amarlo, configurarse con Él, rogar a Él y
anunciarlo.
Desde la
experiencia y el recuerdo de María, el Rosario es oración marcadamente
contemplativa. Dimensión esencialmente necesaria. Lo contrario sería un
cuerpo sin alma, rutina, locuacidad (Mt.6,7). El Rosario requiere un
ritmo tranquilo, reflexivo... ver, recordar, meditar. contemplar... a
través del Corazón de María.
4.1-
Recordar a Cristo con María
(13).
Recordar,
actualizando, los misterios de la salvación. Se realiza eminentemente en
la Liturgia (S.C.10) que no agota la vida espiritual. Es necesaria la
oración personal incesante (S.C.12). El Rosario es oración incesante. La
Liturgia, acción de Cristo y de la Iglesia: acción salvífica por
excelencia. El Rosario, meditación personal de los misterios de Cristo
para asimilarlos: acción contemplativa.
4.2-
Comprender a Cristo desde
María
(14).
María Madre, la
criatura que mejor conoce a Cristo, es la que mejor nos puede conducir a
conocerlo en su vida, en sus misterios y en su doctrina, a comprenderlo,
desde la Encarnación a la Resurrección, desde el anonadamiento a la
Exaltación. El Rosario -> ir a la “escuela de María” para aprender a
conocer, amr, e imtar a Cristo. María es Maestra eficaz que nos
enseña... para aprender a leer a Cristo... como orientó en Caná, en el
Cenáculo (Pentecostés). Nos enseña con su ejemplo desde la Anunciación...
y nos obtiene las gracias para grabar y asimilar los misterios del
Hijo.
4.3-
Configurarse a Cristo con María
(15).
por
la meditación, respiramos a Cristo... como dos amigos íntimo que se van
pareciendo. La espiritualidad cristiana -> configurarse con Cristo: vivir
las exigencias del Bautismo: adhesión, vivir según el Evangelio, vivir su
estilo de vida según la lógica de Cristo, del Evangelio, de su estilo de
vida. -El rosario ayuda a ello por asiduidad amistosa dejándose calar en
costumbres, sentimientos, palabras gestos... (Bto. Bartolomé longo).
María, Madre y Educadora de Cristo, nos va educando y modelando según
Cristo. Ser totalmente de María ( que vive en Cristo y en función de
Cristo) es la mejor manera de ser totalmente de Cristo.
4.4-
Rogar a Cristo con María
(16).
Cristo nos
invita a orar con insistencia (Mt. 7,7; Rom.8,26). María viene en nuestra
ayuda como en Caná . Nos apoyamos en Ella que nos muestra el camino (Jo.2,
3). El Rosario, meditación y súpplica -> Ella intercede, ruega por
nosotros, sale al encuentro de nuestras necesidades. Es “omnipotencia por
gracia”, “omnipotencia suplicante”.
4.5-
Anunciar a Cristo con María
(17). El
Rosario, itinerario de anuncio de los misterios de Cristo en la oración,
catequesis, predicación, momentos difíciles... Los dominicos y la
predicación desde Sto. Domingo.
CAPÍTULO II
CONTEMPLAR A CRISTO CON MARÍA, SIGUIENDO EL EVANGELIO
-
El Rosario, compendio
del Evangelio.
-
El camino de María.
-
El camino del hombre
1-
El Rosario compendio del
Evangelio
(18) Es
evangélico. Es Cristológico. Para contemplar el rostro de Cristo es
necesario acoger y escuchar al Padre por Cristo en el Espíritu Santo. El
Rosario orienta a contemplar el rostro de Cristo siguiendo el Evangelio,
la Palabra de Dios.
2-
Incorporación de los misterios
luminosos
(19).
Conveniencia de incorporar los misterios de la vida pública según los
Evangelios: Bautismo, Caná, Predicación, Transfiguración, Eucaristía.
2.1-
Misterios Gozosos.
(20).
Encarnación... clave de la esperanza y alegría cristianas. Presencia
directa de María.
2.2-
Misterios Luminosos
(21).
Bautismo... Cristo luz del mundo (Jo.8, 12) especialmente en la vida
pública. La presencia de María, directa en las Bodas de Caná, sigue en el
transfondo: “Haced lo que Él os diga” (Jo.2, 5).
2.3-
Misterios Dolorosos
(22).Oración del
huerto... La pasión y muerte, culmen de la Revelación del amor y fuente de
nuestra salvación. Ecce homo: sentido del hombre... con María junto a la
Cruz.
2.4-
Misterios Gloriosos
(23).
Resurrección... ¡Es el resucitado!. El gozo de María... Pentecostés: la
Iglesia familia en torno a María Madre, avivada por el Espíritu Santo
para evangelizar. Alimentan la esperanza. Plena glorificación de Cristo.
3-
El camino de María. De los
misterios al Misterio:
(24).
Los misterios del Rosario no son exhaustivos. Son momentos importantes
para ir conociendo a Cristo progresivamente (Ef.3, 19-21; Col.2, 2-3.
9). ¡Duc in altum!
Es un
conocimiento que compromete. -Es la camino de María, la más comprometida
con Cristo. Los misterios de Cristo, en cierto sentido, son los misterios
de la Madre por su manera comprometida de experimentarlos y vivirlos. -El
Ave María siempre busca al Fruto bendito de su vientre, a Cristo.
4-
El camino del hombre. Misterios
de Cristo, misterio del hombre
(25). Marca el
ritmo de la vida humana: gozo, caminar, sufrir, meta... -Tiene una
dimensión antropológica: el Rosario ayuda a dar sentido y a recapitular la
vida del hombre en Cristo, en sus misterios, en los misterios del Rosario.
El Rosario ayuda a presentar al Señor, por medio de María, los problemas
de la humanidad, familia, persona...
CAPÍTULO III
EL ROSARIO, MÉTODO DE ASIMILACIÓN DEL MISTERIO DE CRISTO
CON Y POR MARÍA.
1-
El Rosario, camino (método) de
asimilación misterio
(26). Con un
método basado en la repetición, especialmente el Ave María, expresión de
amor incansable a la madre amada. Es una dinámica sicológica: repetir,
recordar, grabar, contemplar... -Como la pregunta repetida de Jesús a
Pedro: ¿Me amas? (Jo.21,15-17). El amor a María se dirige a Jesús como a
su fin, a configurarse con Él (Fil.1,21; Gal.2,20). El Rosario ayuda a
crecer en Cristo, a la santidad.
2-
El Rosario, método válido
(27). Dios se
adapta y acepta nuestra manera de ser. Así, métodos en la Liturgia, en la
oración personal, en el Rosario, el contador oriental... Lo puede superar
el don del “silencio místico”. El Rosario y los grados de oración vocal,
meditación, contemplación.
3-
Método mejorable
(28).Características
propias del Rosario: método para contemplar. No es fin. Medio que ha
producido frutos de santidad. Es mejorable. Por eso, misterios luminosos
y sugerencias.
3.1-
Enunciado del misterio
(29). Verlo
(imagen), repetir, contemplar...
3.2-
Escucha de la Palabra de Dios
(30). Para dar
fundamento bíblico: acogida y repetición. Dejar hablar a Dios. Hablar con
Dios.
3.3-
Silencio
(31). Alimento
de la escucha y de la meditación. Fijar la atención. Ayuda a la meditación
y contemplación. Como los silencios litúrgicos.
3.4-
El Padre nuestro
(32). Elevar el
ánimo al Padre con Jesús en el Espíritu Santo (Jo. 1,18; Rom.8,15; Gal.4,6).
Como hermanos -> experiencia eclesial.
3.5- Las 10 Ave María
(33). El Ave
María y el sentido cristológico del Rosario: contemplar y adorar el
misterio que se realiza en María y la complacencia de Dios. En el centro,
el nombre de Jesús. La súplica de la segunda del Ave María parte es
posterior.
3.6-El Gloria
(34). Doxología
trinitaria. Meta y culmen de la contemplación. Levantar el espíritu como
en la contemplación del Tabor (Lc. 9,33).
3.7-
Jaculatoria después de cada
misterio
(35).
¿Específica? ¿Común?
3.8-
El Rosario
(36).
Instrumento para el rezo... Símbolo del camino, cadena que une, vículo de
fraternidad. El Crucifijo: centro.
3.9-
Inicio y conclusión
(37). Dios mío
ven en mi auxilio... Letanías. Por las intenciones del Papa para ganar la
indulgencia . La Salve.
3.10-
Distribución del tiempo
(38). Una parte
diaria, distribuido en la semana o entero... Libertad para el itinerario
contemplativo de los misterios.
CONCLUSIÓN
1-
El Rosario
(39). Oración
tradicional, sencilla, popular. A su vez, encierra profundidad teológica
y ayuda a una contemplación más intensa de los misterios de Cristo con
María.
2-
Le confío:
2.1-
La paz
(40). Sólo una
intervención de lo alto nos dará la paz. El Rosario orientado a la paz ->
Cristo Paz (Ef.2,14) -> Contemplación y compromiso. -El Ave María repetida
-> serenidad, el don de la paz (Jo.14,27; 20,21). -Promueve la caridad, la
unión, Cristo en los hermanos... -Constructores de la paz por la petición
insistente: tener la mirada fija en Cristo, Príncipe de la paz para que en
los corazones y en los pueblos haya sentimientos y gestos de justicia y de
paz.
2.2-
La familia: los padres
(41). Ayuda a
vivir en la realidad unidos interiormente a Cristo, dando testimonio del
amor de Dios. Volver a rezarlo en familia. Liturgia de las Horas y
Rosario: caminos complementarios. -Recomendarlo con convicción. Familia
que reza permanece unida. -Ante los problemas familiares...
2.3-
La Familia: los hijos
(42).
El crecimiento... dificultades... El Rosario, itinerario de la vida de
Cristo desde la concepción... Rezarlo por y con los hijos - ayudas,
adaptaciones...
3-
Tesoro a recuperar
(43).
3.1- Obispos,
sacerdotes, diáconos, agentes de pastoral... promoverlo. -Teólogos: ayudar
a profundizar... Consagrados/as: contemplar a Cristo con María. Ser
Rosarios vivos: vivir -identificación- los misterios de Cristo imitando a
María -Que este llamamiento no sea en balde.
3.2- Súplica
B. Bartolomé Longo (43,final).
3.3- “Oh
María, que pones en nuestras manos las cuentas del Sto. Rosario, enséñanos
a rezarlo, convirtiéndonos como tú, en auténticos contemplativos y
testigos de Cristo! “(Ángelus 27,10,02; O.R.1766 (02)545.
EN RESÚMEN
1-
De nosotros a Cristo:
contemplar a
Cristo con María, con su corazón, sus sentimientos, su mirada...
2-
De Cristo a nosotros:
abrirnos al misterio de Cristo, a su vida, imitando a María,
su estilo de vida...
3-
Ser Rosario
3.1- Vivo:
viviendo los misterios de Cristo por la gracia. En comunión con Él.
3.2- Contemplado.
Por la oración: vocal, meditación, contemplación.
3.3- Apostólico:
Por el testimonio y el apostolado.
Cf. también O.R.1766
(02)545.
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